Juan Martins

Transparencia de la materia

Alexander Search, Álvaro de Campos, Alberto Caeiro, Bernardo Soares, Ricardo Reis, Federico Reis, Antonio Mora, el Barón de Teive, Abilio Quaresma y él, Fernando Pessoa, aquellos sus heterónimos. Incluso una voz femenina: María José. Y otra vez Fernando Pessoa, las voces que se integran en este «pronombre» hecho en y desde la lengua portuguesa, su gentilicio porque su patria es la lengua portuguesa.... Seguir Leyendo...

Sylvia Plath: para una dramática de la modernidad (a modo de ejemplo)

El ambiente del lector en: Soy vertical. Pero preferiría ser horizontal es confusa a la vez que arrollante. Nos abandonamos o nos apegamos a la lectura. Nos introducimos en su instrumentación poética. Por un momento esa apariencia prosaica nos invita a leer con facilidad. Hasta aquí el engaño. Puesto que para entonces estamos involucrados en, si se me permite el término, su sensua­lidad simbólica.... Seguir Leyendo...

Forma geométrica del actor

Con su visión estética el actor sabrá qué puede expresar sobre el espa­cio. Apor­tará una visión inesperada: él devuel­ve, en forma de sím­bolo, los ico­nos de su so­ciedad. Pero cuidado: en forma simbólica no épica, volvemos a decirlo, ofrece un arquetipo abstracto de sus sensacio­nes, de su sociedad. La línea que va a adquirir es, por lo gene­ral, una rup­tura con lo usado, con el es­pacio. ... Seguir Leyendo...

Khalo Parte II

Podría el actor revisar ese uso de la voz y expulsarla sin que el propósito cambie. Más bien reharía el registro en un nuevo nivel expresivo: el diálogo debe llegar con claridad y firmeza a los oídos del espectador y no por esa razón se perdería el lugar del relato teatral: aquello que se relata (con la voz del actor) se afirma en el espectador. ... Seguir Leyendo...

Respirar a Hamlet

El mayor logro del poeta —requiérase actor— es cuando intelec­tualiza sus emociones para crear la imagen que así le exige su voz. Halla las formas que expliquen el hecho de que un actor deba ex­hibir, noche tras noche, las caracte­rís­ticas de su per­so­naje. Sin que eso lo ena­jene. Para que no sea así, él debe ins­trumentar un mé­todo flexi­ble cuya aplicación le permita recrear la estructura de su interpretación de cada noche, sin que se altere la pue­sta en escena. ... Seguir Leyendo...

La sintaxis desolada de Sarah Kane

La escritura se legitima. No quiere, por el contrario, identificarse con género alguno. Es la escritura en sí cuerpo, signo, cadencia, ruptura del tiempo narrativo: postura del lenguaje. Y como el lenguaje es una dinámica independiente que somete al individuo y la sensibilidad, los personajes serán la construcción de esa dinámica: lo real-no real, lo racional-no racional, la demencia-no demencial, reunidos en el espacio de la escritura fundando un nivel de la conciencia. Con ello, no somos dueño de la palabra, sino que esta nos somete a su dinámica. Vivimos... Seguir Leyendo...