No había pasado ni un lustro del término de la Segunda Guerra Mundial, cuando el 4 de abril de 1949, nace la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), 12 fueron los países fundadores; Bélgica, Canadá, Dinamarca, Estados Unidos, Francia (salió en 1966 y regreso en 2009), Holanda, Italia, Islandia, Luxemburgo, Noruega, Portugal y Reino Unido, que tenían el propósito básico de resguardar su seguridad ante cualquier embate externo, especialmente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

 

Eran los años del inicio de la Guerra Fría y los dos líderes militaristas mundiales EEUU y la URSS, afinaban sus estrategias, desarrollando alianzas para fortalecer sus posiciones, los soviéticos crearon en mayo de 1955 el llamado Pacto de Varsovia con propósitos similares, pero para ese año ya se habían integrado a la Alianza Atlántica, Alemania (Alemania Oriental se incorporó en 1990), Grecia y Turquía, las siguientes ampliaciones tardaron un más, España entró 1982, a partir de 1999 comenzó a darse el fenómeno de que se integraron países que pertenecieron pocos años antes a los rivales, Hungría, Polonia, y la Republica Checa.

 

Bulgaria, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Letonia, Lituania y Rumania, ingresaron en 2004, con lo que también se rompía un paradigma, ya que los países bálticos habían sido parte integrante del mayor enemigo la Unión Soviética, para 2009 se unen Croacia y Albania, Montenegro ha sido el último en llegar en 2017, formando hoy un club de 29 naciones, hay tres aspirantes formales, Bosnia-Herzegovina, Georgia y Macedonia del Norte, Ucrania ha detenido su proceso por falta de un referéndum, pero especialmente porque Rusia presiona para que esta integración no suceda, en los años recientes Finlandia y Suecia han sido invitados a participar en prácticas militares conjuntas, pero aún no han movido ficha para ingresar.

La OTAN tiene su sede en Bruselas Bélgica, la preside un Secretario General que tradicionalmente es europeo, actualmente el noruego Jens Stoltenberg quien ya fue durante ocho años Primer Ministro de su país, preside el organismo, sin embargo siendo una cofradía de “defensa militar”, el Comandante Supremo del ejercito siempre, siempre, siempre es estadounidense, desde el primero de ellos Dwight David Eisenhower, hasta el actual Curtis Michael Scaparrotti, la organización cuenta con cuarteles militares listos para su defensa en Alemania, Holanda, Italia, Reino Unido y Turquía, a lo largo de sus casi setenta años ha tenido diversas actuaciones para contribuir a la paz mundial, como en Afganistán, Irak, Libia, Turquía y Yugoslavia; la verdad de las cosas, que la gran mayoría de ellas con resultados lamentables, en donde el respeto a la dignidad de los países, especialmente de sus habitantes no se conoce, de manera especial en Afganistán que fue la primera en la que se invocó el artículo 5 del Tratado, cuando Estados Unidos pidió ayuda para su defensa, y sin duda la actuación más rupestre fue en la antigua Yugoslavia, donde bombardearon ciudades, escuelas y edificios de vivienda, sin recato alguno.

 

Hoy el dilema es grande, ya que el presidente norteamericano Donald John Trump, tiene en la picota al organismo que, según él no aporta lo suficiente en dinero para el mantenimiento del mismo, y ha exigido que suban sus cuotas, al menos que todos inviertan mínimamente el dos por ciento de su PIB en defensa, lo que desde el año pasado generó malestar y fricciones con el resto de los afiliados, uno de ellos es la República Checa, que esta semana que termina junto con Hungría y Polonia, cumplió 20 años dentro del sistema, y tuvo un gasto de defensa del 1.11 por ciento de su PIB en 2018, sin embargo en visita reciente a Washington el Primer Ministro Andrej Babis, ha prometido llegar a al requerimiento en 2024.

 

Como parte de las dos décadas de estar integrada a la organización, los checos invitaron a su conciudadana Marie Jana Korbelová (Madeleine Albright), praguense quien fue la primera mujer en ocupar la Secretaria de Estado norteamericana durante el gobierno de William Jefferson Clinton, para una conferencia sobre el tema, en la que lamentó la situación de países vecinos como los magiares que se debaten en un fascismo antinmigrante, la libertad y la defensa de la democracia, a la que según ella la OTAN contribuye, ya que le da pavor que los rusos los expulsen de Europa.

 

A finales de 2019 se cumplirán 30 años de la Sametová Revoluce, impulsada por Alexander Dubcek y el dramaturgo Václav Havel quienes desde 1968 habían levantado la voz contra los totalitarismos, y defendieron la fascinante Praga a la vega del río enlazando sus brazos con todos los habitantes para impedir la llegada de los tanques soviéticos al casco maravillosamente antiguo, bajo la premisa de que si hacían arte; literatura, música, teatro, opera, serían libres, porque su espíritu nunca estaría atrapado, el poeta años después fue el primer presidente de la República Checa.

 

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