Hace justo 100 años, se apagó una de las mentes más brillantes, que han iluminado la humanidad, y como macabra coincidencia, la pandemia de la gripe española que asoló el planeta en ese tiempo, fue la que le cobró la vida a Maximilian Karl Emil Weber, el 14 de junio de 1920. 

Max Weber siempre se auto consideró historiador, si bien sus estudios del Derecho, en las Universidades de Heidelberg, Berlín, y Gotinga,

dirían otra cosa, además de lograr importantísimos escritos en Administración Pública, Arte, Economía, Filosofía, Jurisprudencia, Política, Religión, y Sociología, de esta última disciplina está considerado el padre, junto con los franceses Isidore Marie Auguste Francois Xavier Comte, David Émile Durkheim y su paisano Karl Heinrich Marx, definitivamente es fundador del estudio moderno anti positivista.

Es preciso entender que nuestro personaje nació en abril de 1864, así que solo tenía siete años, cuando Wilhelm Friedrich Ludwig Von Hohenzollern, (Guillermo I de Prusia), junto con Otto Eduard Leopold Von Bismarck-Schönhausen, logran la unificación de los reinos de Germania, lo que hace que sea una época de nacionalismo a flor de piel, donde lo que primaba por sobre todas las cosas, era consolidar el gusto y deseo de los habitantes del país por ser alemanes, el mismo Weber, provenía de una familia en la que el padre trabaja en la administración pública y era impulsor decidido del tema, lo que le permitió estar en contacto con las figuras políticas más importantes, y lo mejor, intercambiar ideas con ellos, por tal no es raro, que en su primera juventud decidiera abrazar la carrera de las armas, pero además será un sentimiento que lo acompañará el resto de su vida y sus escritos, por ello hay quienes erróneamente piensan que, junto con Georg Wilhelm Friedrich Hegel, son los padres ideológicos del Adolf Hitler Pölzl.

Por principio de cuentas Max Weber, se apega precisamente a Hegel

y establece que quien busca el conocimiento social científico, tiene que delimitar su campo de estudio, y puntualizar particularidades, y que este entendimiento nunca se podrá hacer, dejando de lado, tres valores de quien lo lleva a cabo, demostrándolo con diferentes escritos; en primer término, la Religión, en la Ética Protestante y el Espíritu del Capitalismo; en segundo lugar, la Economía, con el extenso pero indispensable estudio, Economía y Sociedad; y en tercer lugar, pero no necesariamente el último, Liderazgo Político, con el estudio intitulado, el Político y el Científico; por ello es que si bien coincide en la parte económica con Marx, diciente de que como lo expresaba éste, de que la evolución económica sería universal y por etapas lógicamente definidas, Weber piensa que Karl Marx, confunde el ser, con el deber ser, al menospreciar la preponderancia de la Religión y los Caudillos políticos, en sus trabajos.

Nuestro personaje dedica largos y concienzudos estudios, sobre el poder de la burocracia como un elemento de dominación, de la cual piensa, se puede perder el control,

sí el gobernante no cuenta con una base democrática para su liderazgo, les llamaba los políticos profesionales, aquellos que viven de la política, sin el carisma ni las agallas para visualizar las necesidades de una nación, simplemente conservando sus espacios laborales con la finalidad de tener un ingreso seguro, para evitarlos decía, se tiene que contar con políticos de tiempo completo, los que trabajan sin importar horarios o salarios, los que viven para la política, ya que como hemos visto, consideraba que los avances no son de buena fe, sino que con origen y resultado que, en el mundo social, son multicausales. 

Para Max Weber, la política se hace con la cabeza, con raciocinio, donde lo científico vaya idealmente de la mano del carisma de los dirigentes, lo que con creatividad, indudablemente llevará a la modernización social, argumenta que existen dos éticas; la de Convicción, que se rige por principios morales internos inamovibles, y la de Racionalidad, en donde se miden los efectos, aún por encima de los ideales, evaluando la conclusión de la medida; por ello, es que no fue casual, que su libro Economía y Sociedad, fuera elegido como el más importante en una encuesta de la Asociación Internacional de Sociología.

Siempre me he preguntado, porqué los gobernantes actuales, si bien es cierto no les gusta leer, muchos no creo sepan, pero, sí tienen el deseo de ostentar el poder, no pagan a asesores, que los tienen, les instruyan hacer resúmenes de pocas palabras, y si es necesario con algún dibujo, donde puedan entender los orígenes científicos de la actividad a la que se dedican, en una de esas, hasta se encuentran con esta frase, “Quien busque la salvación de su alma y la redención de las ajenas no la encontrará en los caminos de la política, cuyas metas son distintas y cuyos éxitos sólo pueden ser alcanzados por medio de la fuerza”, en una de esas, hasta deciden dejarnos vivir en paz.

 

Sigue leyendo a José Ortíz Adame

No Hay Más Artículos